1. Razones históricas: Estados Unidos fue uno de los últimos países en adoptar el sistema métrico, del que forma parte Celsius. En el siglo XVIII, cuando se fundaron los Estados Unidos, la mayor parte del mundo utilizaba diferentes sistemas de medición. Estados Unidos adoptó el sistema de medición inglés, que incluía la escala Fahrenheit.
2. Inercia cultural: Una vez que un sistema de medición se establece en un país, puede resultar difícil cambiarlo. Las personas están familiarizadas con la escala Fahrenheit y pueden resistirse a cambiar a un nuevo sistema.
3. Legado de instrumentos científicos: Los científicos de Estados Unidos han utilizado los termómetros Fahrenheit durante muchos años. Muchos laboratorios y experimentos se configuran y calibran según la escala Fahrenheit, lo que hace que sea más conveniente seguir utilizándola dentro del mundo académico y la comunidad científica.