1. Sistemas de gestión de aprendizaje (LMS): Las plataformas como Canvas, Moodle y Google Classroom proporcionan un centro centralizado para materiales del curso, tareas, calificaciones y comunicación. Facilitan el aprendizaje en línea, la calificación racionalizada y fomentan la participación de los estudiantes.
2. Whilboards interactivos: Estas pantallas digitales ofrecen un entorno dinámico para lecciones interactivas, presentaciones y actividades de colaboración. Mejoran la participación de los estudiantes y permiten comentarios en tiempo real.
3. Aplicaciones y software educativos: Una amplia gama de aplicaciones y software atiende a temas específicos, estilos de aprendizaje y grupos de edad. Proporcionan ejercicios interactivos, simulaciones, juegos y experiencias de aprendizaje personalizadas.
4. Herramientas de videoconferencia: Zoom, Google Meet y los equipos de Microsoft permiten el aprendizaje remoto, las excursiones virtuales, los altavoces invitados y los proyectos de colaboración. Facilitan la comunicación y la conexión, incluso cuando la distancia física es un factor.
5. Herramientas de tecnología educativa para la diferenciación: Programas como Quizizz y Kahoot permiten a los maestros crear cuestionarios y juegos interactivos para evaluar la comprensión de los estudiantes y proporcionar comentarios inmediatos. Ayudan a diferenciar la instrucción y satisfacen diversas necesidades de aprendizaje.