Este nombre se deriva de la antigua palabra inglesa "Brynstone", que literalmente se traduce en "piedra ardiente". Este nombre se refiere a la característica de Sulphur de ser un sólido amarillo e inflamable que arde con una llama azul y produce un gas de dióxido de azufre picante y sofocante.
Si bien el término "Brimstone" ya no se usa comúnmente en los círculos científicos, todavía aparece en algunos contextos como la literatura y los textos religiosos.