Realismo:
* En el mundo real, no existe la alquimia como profesión. Entonces, no hay consecuencias para "no hacer el trabajo", ya que no existe.
* Sin embargo, si consideramos "alquimia" como una metáfora de cualquier profesión calificada , entonces, las consecuencias de no hacer un trabajo son las mismas que cualquier otro campo:
* Pérdida de ingresos: Si no proporcionan los resultados deseados, no serán contratados ni pagados.
* Daño de reputación: No cumplir con las expectativas puede dañar su reputación y dificultar el trabajo futuro.
* decepción de los clientes: Pueden enfrentar una decepción o incluso enojo de quienes los contrataron.
Fantasía:
* En los mundos de fantasía, la alquimia es a menudo una profesión poderosa. Las consecuencias del fracaso pueden ser mucho más drásticas, dependiendo del mundo específico:
* Consecuencias mágicas: Algunos mundos pueden tener consecuencias mágicas para fallar en la alquimia, como perder habilidades mágicas o ser maldecido.
* Consecuencias sociales: Podrían ser ostracados de su gremio, desterrados de su ciudad o incluso cazados por aquellos que los ven como una amenaza.
* Consecuencias legales: En algunos mundos, la alquimia podría estar regulada por la ley, y no cumplir con esas regulaciones podría conducir a multas, prisión o incluso ejecución.
* Consecuencias físicas: Los experimentos fallidos podrían provocar lesiones, explosiones o incluso la muerte.
Ejemplos específicos:
* El gremio de alquimistas: En algunas historias de fantasía, los alquimistas pertenecen a un gremio que hace cumplir los estándares y castiga a los que fallan.
* El aprendiz del hechicero: En esta historia clásica, el fracaso del aprendiz de seguir las instrucciones conduce al caos y al desastre cercano.
* Los Scrolls de ancianos: En esta serie de juegos, los alquimistas que manejan los ingredientes pueden crear brebajes peligrosos o incluso mortales.
En última instancia, las consecuencias de que un alquimista no haga su trabajo depende del creador del mundo ficticio. Es una cuestión de la configuración y la imaginación, y la respuesta puede ser cualquier cosa, desde una simple falta de pago hasta un desastre mágico catastrófico.