* unión metálica: La capacidad de los metales para realizar electricidad en su estado sólido se debe a su unión metálica única. En los metales, los electrones están delocalizados, lo que significa que no están estrechamente vinculados a átomos individuales, sino que pueden moverse libremente en toda la estructura. Este "mar" de electrones permite el fácil flujo de corriente eléctrica.
* Estado gaseoso: En el estado gaseoso, los átomos están muy separados y la estructura de unión metálica se descompone. Los electrones ya no están delocalizados y están estrechamente unidos a átomos individuales. Esto significa que no hay flujo libre de electrones y, por lo tanto, no hay conductividad eléctrica.
Excepciones:
Si bien los metales en sí no tienen electricidad en el estado gaseoso, algunos gases ionizados , también conocido como plasmas, puede realizar electricidad. En los plasmas, algunos de los átomos se ionizan, lo que significa que han perdido o ganado electrones, lo que resulta en electrones e iones libres que pueden transportar una corriente eléctrica. Sin embargo, esta no es una propiedad de metales en su estado gaseoso.
En resumen: Los metales conducen electricidad en su estado sólido debido a su unión metálica. En el estado gaseoso, la unión metálica se interrumpe y los electrones ya no son libres de moverse, lo que resulta en una falta de conductividad.