Los compuestos están formados por dos o más elementos que se han unido químicamente. Los átomos de diferentes elementos se mantienen unidos mediante enlaces químicos, que se forman cuando se comparten o intercambian electrones entre átomos. Los compuestos pueden estar compuestos por dos o más elementos no metálicos, o por un metal y un no metal. En cualquier caso, los elementos que forman un compuesto siempre están presentes en una proporción fija en masa. Por ejemplo, el agua es un compuesto formado por hidrógeno y oxígeno, y siempre contiene dos átomos de hidrógeno por cada átomo de oxígeno.