Propiedades físicas:
* Apariencia: Las sustancias nuevas pueden tener diferentes colores, texturas y estados físicos (sólido, líquido, gaseoso) en comparación con las sustancias originales.
* Densidad: La densidad de una sustancia nueva puede ser diferente de la sustancia antigua, lo que afecta su peso y flotabilidad.
* Punto de fusión y punto de ebullición: El punto de fusión y el punto de ebullición de una sustancia nueva pueden ser mayores o menores que los de la sustancia antigua, lo que afecta su comportamiento en diferentes condiciones de temperatura.
* Solubilidad: La solubilidad de una nueva sustancia en disolventes como agua o disolventes orgánicos puede diferir de la solubilidad de la sustancia original.
* Conductividad eléctrica: La conductividad eléctrica de una nueva sustancia puede ser diferente, lo que influye en su capacidad para conducir electricidad.
* Propiedades magnéticas: Algunas sustancias nuevas exhiben propiedades magnéticas, mientras que las sustancias originales pueden no exhibirlas, o viceversa.
Propiedades químicas:
* Reactividad: La reactividad de una sustancia nueva puede ser mayor o menor que la de la sustancia antigua, lo que afecta su capacidad para sufrir reacciones químicas e interactuar con otras sustancias.
* Estabilidad: La estabilidad de una sustancia nueva puede ser mayor o menor que la de la sustancia antigua, determinando su resistencia a la descomposición o degradación.
* Inflamabilidad: La inflamabilidad de una sustancia nueva puede ser diferente, lo que indica su susceptibilidad a incendiarse.
* Toxicidad: La toxicidad de una sustancia nueva puede variar respecto de la sustancia antigua, lo que requiere diferentes precauciones de seguridad durante su manipulación y uso.
Impacto ambiental:
* Biodegradabilidad: La biodegradabilidad de una sustancia nueva, o su capacidad para descomponerse naturalmente en el medio ambiente, puede ser diferente de la sustancia original. Esto puede afectar su impacto ecológico.
* Impacto Ambiental: El impacto ambiental general de una nueva sustancia puede variar significativamente según factores como su persistencia, toxicidad y potencial de bioacumulación.
* Sostenibilidad: Se pueden diseñar nuevas sustancias para que sean más sostenibles y respetuosas con el medio ambiente en comparación con las sustancias más antiguas, reduciendo el consumo de recursos, la contaminación u otros efectos negativos sobre el medio ambiente.
Es importante señalar que las propiedades de las nuevas sustancias se estudian y evalúan cuidadosamente antes de introducirlas en el mercado para garantizar su seguridad, eficacia y cumplimiento de las normativas. Además, la investigación en curso y los avances tecnológicos continúan conduciendo al desarrollo de nuevas sustancias con propiedades adaptadas a aplicaciones específicas.