1. Neutralización del ácido:el óxido de calcio es una base fuerte que puede neutralizar la acidez del suelo. Cuando se agrega a suelos ácidos, el óxido de calcio reacciona con los iones de hidrógeno (H+) en la solución del suelo, reduciendo su concentración. Este proceso aumenta el pH del suelo, haciéndolo menos ácido.
2. Disponibilidad de nutrientes:Muchos nutrientes esenciales para las plantas, como el fósforo, el potasio y el magnesio, están más fácilmente disponibles para las plantas en suelos con un pH ligeramente ácido a neutro. Al reducir la acidez del suelo, el óxido de calcio mejora la disponibilidad de estos nutrientes, mejorando el crecimiento de las plantas y el rendimiento de los cultivos.
3. Estructura del suelo:La acidez del suelo puede provocar la descomposición de los agregados del suelo, lo que da como resultado una estructura deficiente del suelo. El óxido de calcio ayuda a estabilizar la estructura del suelo promoviendo la formación de agregados. Esta estructura mejorada del suelo mejora la infiltración del agua, la aireación y la penetración de las raíces, lo que beneficia el crecimiento de las plantas.
4. Actividad de los microorganismos:la aplicación de óxido de calcio puede influir en la composición y actividad de los microorganismos del suelo. Promueve el crecimiento de microorganismos beneficiosos, como las bacterias fijadoras de nitrógeno y los hongos micorrízicos, que mejoran el ciclo de nutrientes y la salud general del suelo.
5. Toxicidad del aluminio:En suelos ácidos, el aluminio puede liberarse en formas tóxicas que pueden dañar las raíces de las plantas e inhibir el crecimiento. El óxido de calcio reduce la toxicidad del aluminio al unirse con iones de aluminio y formar compuestos menos dañinos.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que el uso de óxido de calcio debe gestionarse con cuidado según las condiciones del suelo y los requisitos del cultivo. El encalado excesivo puede elevar demasiado el pH del suelo, lo que provoca desequilibrios de nutrientes y una menor disponibilidad de ciertos micronutrientes como el hierro y el manganeso. Por lo tanto, se recomienda realizar análisis del suelo y consultar adecuadamente con expertos agrícolas para determinar la cantidad adecuada de óxido de calcio necesaria para lograr el pH deseado del suelo y mantener un crecimiento óptimo de las plantas.