Sí, se puede mezclar peróxido de hidrógeno y bicarbonato de sodio. Cuando se mezclan, crean una reacción química que produce gases de oxígeno y dióxido de carbono. El gas oxígeno liberado por la reacción puede ayudar a blanquear los dientes, mientras que el gas dióxido de carbono puede ayudar a eliminar la placa y el sarro. Sin embargo, es importante señalar que esta mezcla no se debe tragar.