1. Disociación del Hidróxido de Sodio:
Cuando el hidróxido de sodio se disuelve en agua, se disocia en iones de sodio (Na+) e iones de hidróxido (OH-). Los iones hidróxido son responsables del carácter básico de la solución.
2. Desprotonación de la glucosa:
La glucosa, un azúcar monosacárido, contiene múltiples grupos hidroxilo (-OH). En presencia de una base fuerte como el hidróxido de sodio, los iones de hidróxido extraen un protón (H+) de uno de los grupos hidroxilo de la glucosa. Esta desprotonación da como resultado la formación de una molécula de glucosa cargada negativamente, conocida como anión de glucosa (C6H11O6-).
3. Formación de gluconato de sodio:
El anión glucosa cargado negativamente reacciona inmediatamente con los iones de sodio presentes en la solución para formar gluconato de sodio (C6H11O7Na). El gluconato de sodio es una sal formada por el anión glucosa y el catión sodio.
La reacción general se puede representar de la siguiente manera:
C6H12O6 (glucosa) + NaOH (hidróxido de sodio) → C6H11O7Na (gluconato de sodio) + H2O (agua)
Esta reacción demuestra las propiedades básicas del hidróxido de sodio, que puede desprotonar ácidos débiles como los grupos hidroxilo de la glucosa, lo que lleva a la formación de una sal (gluconato de sodio) y agua.