Ácido débil: Un ácido débil es un ácido que se disocia parcialmente en agua, lo que significa que sólo una pequeña fracción de las moléculas del ácido dona un ion hidrógeno (H+). Esto da como resultado una menor concentración de iones H+ en la solución en comparación con un ácido fuerte de la misma concentración. Los ácidos débiles tienen un valor de constante de disociación (Ka) inferior a 1. Ejemplos de ácidos débiles incluyen el ácido acético (CH3COOH) y el ácido carbónico (H2CO3).
Ácido diluido: Un ácido diluido es una solución ácida que tiene una baja concentración de ácido. Esto significa que hay menos moléculas de ácido por unidad de volumen de solución en comparación con un ácido concentrado. El término "diluir" no implica necesariamente que el ácido sea débil. Un ácido diluido puede ser un ácido fuerte o un ácido débil. Por ejemplo, una solución diluida de ácido clorhídrico (HCl), que es un ácido fuerte, sigue siendo ácida pero tiene una concentración menor de iones H+ en comparación con una solución concentrada de HCl.
En resumen, un ácido débil se caracteriza por su disociación parcial en agua y un valor de Ka bajo, mientras que un ácido diluido es simplemente una solución ácida con una baja concentración de ácido.