Gases: En el caso de los gases, la concentración suele expresarse en unidades de presión, como atmósferas (atm) o pascales (Pa). La expresión de la constante de equilibrio para una reacción gaseosa debe incluir las presiones parciales de los reactivos y productos en las unidades apropiadas.
Soluciones: Para reacciones en soluciones, la concentración normalmente se expresa en unidades de molaridad (M) o molalidad (m). La expresión de la constante de equilibrio para una reacción en solución debe incluir las concentraciones molares o molalidades de los reactivos y productos.
Sólidos y Líquidos: Se considera que los sólidos y los líquidos están en estado puro y tienen una concentración constante. Por lo tanto, sus concentraciones no están incluidas en la expresión de la constante de equilibrio. Sin embargo, es importante indicar la presencia de sólidos o líquidos en la expresión de la constante de equilibrio escribiéndolos como (s) o (l), respectivamente.
Al representar correctamente los estados físicos de los reactivos y productos, la expresión de la constante de equilibrio proporciona información precisa sobre las concentraciones relativas de especies en equilibrio y permite el cálculo de concentraciones de equilibrio en condiciones específicas. Descuidar o tergiversar los estados físicos puede conducir a valores incorrectos de las constantes de equilibrio y predicciones inexactas del comportamiento de la reacción.