Por ejemplo, considere el compuesto iónico cloruro de sodio (NaCl). Los átomos de sodio pierden un electrón y se convierten en iones de sodio cargados positivamente (Na+). Los átomos de cloro ganan un electrón y se convierten en iones de cloruro con carga negativa (Cl-). Cuando los átomos de sodio y cloro se combinan para formar cloruro de sodio, la carga positiva de los iones de sodio es igual en magnitud a la carga negativa de los iones de cloruro, lo que da como resultado una carga eléctrica neutra en general.
La atracción entre los iones cargados positiva y negativamente en un compuesto iónico se llama fuerza electrostática o enlace iónico. Esta fuerza mantiene unidos los iones y mantiene la integridad estructural del compuesto.
Es importante señalar que la carga neutra de un compuesto iónico es una propiedad macroscópica que se aplica al compuesto en su conjunto. A nivel microscópico, los iones individuales dentro del compuesto conservan sus respectivas cargas. Sin embargo, la disposición y estequiometría de los iones son tales que la carga neta total es cero.