Mezcla: La sangre se considera una mezcla porque contiene múltiples sustancias que no están unidas químicamente. Los componentes de la sangre, como el plasma, las células y las proteínas, se pueden separar mediante diversos medios físicos, como la centrifugación.
Heterogéneo: La sangre es una mezcla heterogénea, lo que significa que su composición no es uniforme en toda su extensión. Los diferentes componentes de la sangre tienen propiedades distintas y pueden observarse como fases separadas bajo un microscopio. Por ejemplo, los glóbulos rojos aparecen como estructuras distintas en forma de disco suspendidas en el plasma líquido.
Sustancia pura: Una sustancia pura, por otro lado, es una sustancia que tiene una composición química definida y no puede separarse en componentes más simples por medios físicos. Los elementos y compuestos son ejemplos de sustancias puras.