La temperatura aproximada para un baño caliente es entre 104°F (40°C) y 113°F (45°C). Este rango de temperatura se considera ideal para favorecer la relajación, aliviar la tensión muscular y mejorar la circulación. Sin embargo, es importante tener en cuenta que las preferencias individuales pueden variar y algunas personas pueden preferir temperaturas ligeramente más frías o más cálidas para sus baños. Siempre es mejor ajustar la temperatura del agua a un nivel que le resulte cómodo y seguro.