Aguas residuales industriales y municipales :Los PFAS se utilizan ampliamente en procesos industriales y productos domésticos, incluidos utensilios de cocina antiadherentes, ropa impermeable y espumas contra incendios. Estos productos químicos ingresan a las plantas de tratamiento de aguas residuales desde instalaciones industriales y hogares. Aunque las plantas de tratamiento de aguas residuales están diseñadas para eliminar contaminantes, a menudo son ineficaces para eliminar los PFAS. Como resultado, las aguas residuales contaminadas con PFAS pueden descargarse en cursos de agua cercanos, incluida la Bahía de Biscayne.
Escorrentía de aguas pluviales :Las PFAS también pueden ingresar a la Bahía de Biscayne a través de la escorrentía de aguas pluviales. Las superficies impermeables como carreteras, estacionamientos y tejados evitan que el agua de lluvia sea absorbida por el suelo. En cambio, la escorrentía transporta contaminantes, incluidos los PFAS, a los desagües pluviales y, en última instancia, a la bahía.
Contaminación de aguas subterráneas :Las PFAS pueden contaminar el agua subterránea, que eventualmente puede filtrarse a la Bahía de Biscayne. Los vertederos, los sitios industriales y las bases militares son fuentes comunes de contaminación del agua subterránea. Cuando el agua subterránea contaminada con PFAS llega a la bahía, puede dañar la vida marina y contaminar el agua.
Deposición atmosférica :Las PFAS también pueden transportarse a través de la atmósfera y depositarse en la Bahía de Biscayne. Las emisiones industriales, los gases de escape de los vehículos y otras fuentes liberan PFAS al aire. Estos productos químicos pueden viajar largas distancias antes de depositarse en la superficie terrestre o acuática.
La presencia de PFAS en la Bahía de Biscayne plantea riesgos importantes para la salud de la vida marina. Los delfines, peces y manatíes, así como otros organismos acuáticos, pueden ingerir o absorber PFAS mediante el contacto directo con el agua contaminada o al consumir presas contaminadas. Las PFAS pueden acumularse en los tejidos de estos animales, lo que provoca posibles problemas de salud, como problemas reproductivos, anomalías del desarrollo, disfunción del sistema inmunológico y cáncer.
Para mitigar la contaminación de la Bahía de Biscayne por PFAS, es crucial abordar las fuentes de estos químicos e implementar estrategias de gestión efectivas. Esto incluye reducir la producción y el uso de PFAS en procesos industriales y productos de consumo, mejorar las tecnologías de tratamiento de aguas residuales para eliminar las PFAS, gestionar la escorrentía de aguas pluviales para evitar que las PFAS ingresen a los cursos de agua y abordar la contaminación de las aguas subterráneas. Al tomar estas medidas, podemos ayudar a proteger la vida marina de la Bahía de Biscayne y garantizar la salud del ecosistema a largo plazo.