El ácido clorhídrico, o HCl, es un ácido que es altamente corrosivo cuando se concentra. Manéjelo siempre con cuidado para evitar daños o lesiones. Debe tomar precauciones de seguridad específicas al manipular, transportar y almacenar HCl y obtener ayuda médica de inmediato si se produce un contacto accidental.
Manipulación
Use un delantal resistente a productos químicos, guantes resistentes a productos químicos y gafas protectoras contra salpicaduras químicas en todo el tiempo al manipular HCl para proteger sus ojos y piel. El ácido clorhídrico concentrado es tóxico si se inhala, por lo tanto, evite respirarlo y manipúlelo siempre debajo de una campana extractora.
Transporte
Use portadores de botellas irrompibles o botellas recubiertas de PVC cuando transporte HCl. Compruebe si hay grietas en la botella de ácido antes de levantarla o tocarla. Busque el ácido derramado en el mango o en la mesa antes de tocar la botella. Pequeñas cantidades de HCl pueden arrojarse al fregadero con grandes cantidades de agua.
Almacenamiento
Los ácidos deben almacenarse en un gabinete de madera dedicado. Los gabinetes de madera son mejores que los gabinetes de metal para almacenar ácidos porque el metal se corroe fácilmente debido a los vapores de ácido clorhídrico. Mantenga siempre una tapa de botella de ácido codificada por colores en su botella para que sepa qué botella contiene HCl.
En caso de emergencia
Si está expuesto a un ácido nocivo como el HCl, busque atención médica de inmediato. Si el ácido salpica su piel, enjuáguelo con agua durante 15 a 20 minutos. Si le entra ácido en los ojos, enjuáguelos inmediatamente con agua durante un mínimo de 15 a 20 minutos. Si el ácido empapa su ropa, quítesela inmediatamente antes de que llegue a la piel.