Gráficamente abstracto. Crédito:Biología química celular (2022). DOI:10.1016/j.chembiol.2022.08.001
Un nuevo estudio publicado en Cell Chemical Biology describe un enfoque alternativo para tratar la diabetes mediante la identificación de fármacos que aumentan directamente el número de células que expresan incretina. El trabajo es resultado de investigadores del Karolinska Institutet.
"Anteriormente, realizamos evaluaciones imparciales de moléculas pequeñas para nuevas formas potenciales de tratar la diabetes dirigiéndonos a las células beta productoras de insulina. Sin embargo, lo que creo que es emocionante con este trabajo es que aprovechamos nuestro enfoque único de descubrimiento de fármacos in vivo para un diferentes órganos y células enteroendocrinas, que también tienen el potencial de mejorar el control de la diabetes", dice el investigador principal Olov Andersson del Departamento de Biología Celular y Molecular.
Las hormonas liberadas por el intestino tienen funciones importantes en la modulación de la saciedad, la secreción de insulina y los niveles de glucosa en sangre. De relevancia para la diabetes, las incretinas son hormonas secretadas con la ingesta de alimentos para aumentar la secreción de insulina y reducir los niveles de glucosa en sangre. Hay dos incretinas diferentes que se llaman GIP y GLP-1. Para identificar moléculas pequeñas que aumentan directamente el número de células que expresan incretinas, los investigadores establecieron una pantalla química in vivo de alto rendimiento midiendo la cantidad de GIP en el pez cebra. Varios de los candidatos a fármacos identificados aumentan el número de células que expresan incretinas y mejoran el control de la glucosa tanto en el pez cebra como en los ratones diabéticos.
Desarrollar terapias que aumenten el número de células enteroendocrinas, en lugar de usar análogos de las propias hormonas, es un enfoque atractivo porque las hormonas se pueden secretar de manera fisiológica. Además, en este estudio, los investigadores aprovechan el potencial de detección en el pez cebra y presentan un concepto en el que las moléculas pequeñas pueden reforzar ampliamente el sistema enteroendocrino, con posibles implicaciones para la enfermedad metabólica.
Para identificar moléculas pequeñas que aumentan el número de células que expresan incretinas, los investigadores establecieron una pantalla química in vivo de alto rendimiento mediante el uso del promotor gip para impulsar la expresión de luciferasa en el pez cebra. El modelo de pez cebra es ideal para el descubrimiento de fármacos in vivo, ya que combina el alto rendimiento de las pantallas in vitro con la complejidad fisiológica y la relevancia de los estudios en animales. Identificaron varios éxitos, uno de los cuales fue particularmente eficaz para aumentar la cantidad de células que expresan incretina tanto en el pez cebra como en los ratones.
Los investigadores ahora continuarán examinando si los éxitos también funcionan en organoides intestinales humanos (una especie de mini-órgano que se puede cultivar en cultivo celular). Además, los estudios futuros pueden extenderse al estudio de la secreción de insulina, el efecto de la incretina, varios modelos de diabetes en ratones, mutagénesis específica de tejido y células/tejidos humanos. En general, aumentar la cantidad de células enteroendocrinas es un área poco estudiada que aún no se ha explorado terapéuticamente. Estudio describe nueva forma de generar células productoras de insulina