Los diagramas de Venn ilustran el número de identificaciones de moléculas pequeñas de suero y DBS y la superposición entre los tipos de muestras. Las moléculas pequeñas se separaron en identificaciones de lípidos y metabolitos polares y en aquellas estadísticamente significativas entre los grupos de pacientes. Crédito:Laboratorio Nacional del Noroeste del Pacífico
Los estudios longitudinales de enfermedades requieren recolectar biofluidos, preferentemente sangre. Pero obtener muestras de sangre en suero requiere el trabajo de un profesional, y almacenar miles de estas muestras a -80 grados C significa usar mucha energía y espacio en el congelador.
Estas limitaciones hacen que las gotas de sangre seca (DBS) sean de gran interés para los investigadores. Pueden ser recolectados de forma no invasiva en ubicaciones remotas por personas no profesionales, transportado a bajo precio, y se puede almacenar a temperatura ambiente en un espacio comparativamente limitado.
Dadas las muchas ventajas, la pregunta es:¿Es útil la ECP en los estudios longitudinales que siguen a la enfermedad metabólica? Un nuevo artículo dirigido por investigadores del Laboratorio Nacional del Noroeste del Pacífico (PNNL) compara DBS con muestras de suero.
Ahora comprendemos mejor las limitaciones de las muestras de DBS. (Se necesitan muestras de suero para estudios longitudinales de metabolitos polares si las muestras de DBS se almacenan a temperatura ambiente). Y ahora sabemos que las muestras de DBS son adecuadas para evaluar los cambios en los lípidos.
El papel, por los autores principales Jennifer E. Kyle y Erin S. Baker de PNNL, compara la eficacia de las muestras de suero con DBS mediante el análisis de metabolitos polares superpuestos (64) y lípidos (336) de muestras de casos y controles recolectadas en 2000-2001.
Utilizaron muestras por triplicado de pacientes masculinos mayores con un índice de masa corporal alto, triglicéridos, y niveles de glucosa y HDL (lipoproteína de alta densidad) baja, comparándolos con un grupo de control formado por hombres mayores con niveles normales. Los DBS se almacenaron a temperatura ambiente después de la recolección y se compararon con muestras de suero emparejadas almacenadas a -80ºC.
Se utilizó espectrometría de masas para identificar 400 lípidos y metabolitos polares. Los lípidos y metabolitos de la DBS se compararon con los de las muestras de suero para determinar si se produjo degradación molecular con el tiempo y si la firma de la enfermedad se conservó en el grupo de pacientes.
Los hallazgos respaldan la evidencia de que los lípidos se pueden analizar en muestras de DBS más antiguas y pueden proporcionar información importante en estudios longitudinales.
Se necesitan análisis futuros para abordar cuestiones relacionadas con los metabolitos y lípidos polares en muestras de suero y DBS recientes, y en muestras de DBS que se han almacenado a temperaturas más frías durante largos períodos de tiempo.