Así es como funciona:
* menisco cóncavo: Los líquidos que se sienten atraídos por el recipiente (por ejemplo, agua en un tubo de vidrio) forman un menisco cóncavo, que se curvan hacia arriba en los bordes. La medición se toma en el fondo del menisco, donde toca el tubo.
* menisco convexo: Los líquidos que son repelidos por el contenedor (por ejemplo, mercurio en un tubo de vidrio) forman un menisco convexo, curvándose hacia abajo en los bordes. La medición se toma en la top del menisco, donde toca el tubo.
¿Por qué es esto importante?
La superficie curva del menisco puede crear un error en su medición si no la lee correctamente. Al centrarse en la parte apropiada del menisco (abajo para cóncavo, superior para convexo), se asegura de que su medición sea precisa.
Aquí hay un ejemplo:
Imagine que está utilizando un cilindro graduado para medir 50 ml de agua. Si lee la medición en la parte superior del menisco, obtendrá un volumen más bajo que la cantidad real de agua presente. Sin embargo, al leer la medición en la parte inferior del menisco, obtendrá una representación más precisa del volumen del agua.
Takeaways de teclas:
* El menisco es una superficie curva formada por un líquido en un recipiente.
* El tipo de menisco (cóncavo o convexo) depende de la interacción entre el líquido y el contenedor.
* Leer el menisco en el punto correcto (abajo para cóncavo, superior para convexo) garantiza una medición precisa del volumen.