Los investigadores utilizaron una combinación de electrofisiología e imágenes de calcio para registrar la actividad de neuronas individuales en la corteza auditiva y el hipocampo de los murciélagos mientras realizaban ecolocalización e interacciones sociales.
Descubrieron que las neuronas de la corteza auditiva respondían a características acústicas específicas de las llamadas de ecolocalización del propio murciélago, así como a las llamadas de ecolocalización de otros murciélagos. Esto sugiere que la corteza auditiva desempeña un papel en la ecolocalización social y autogenerada.
Por el contrario, se descubrió que el hipocampo participa en la memoria y la comunicación social. Las neuronas del hipocampo respondieron a las llamadas sociales de otros murciélagos, y esta actividad fue modulada por el contexto social del murciélago. Por ejemplo, las neuronas del hipocampo eran más activas cuando los murciélagos interactuaban con murciélagos familiares que cuando interactuaban con murciélagos desconocidos.
Estos hallazgos proporcionan nuevos conocimientos sobre los mecanismos neuronales que subyacen a la ecolocalización y el comportamiento social en los murciélagos. Sugieren que la corteza auditiva participa en el procesamiento de la información acústica del entorno, mientras que el hipocampo participa en la memoria social y la comunicación. Además, muestran que los circuitos neuronales que subyacen a la ecolocalización y el comportamiento social de los murciélagos están altamente interconectados, lo que sugiere que estos dos comportamientos están estrechamente relacionados.