Los genes son secuencias de ADN que se pueden dividir en segmentos funcionales. También producen un producto biológicamente activo, como una proteína estructural, enzima o ácido nucleico. Al unir segmentos de genes existentes en un proceso llamado clonación molecular, los científicos desarrollan genes con nuevas propiedades. Los científicos empalman genes en el laboratorio e insertan el ADN en plantas, animales o líneas celulares.
¿Por qué empalmar genes?
Aunque algunas noches dicen que es prudente dejar la naturaleza en paz, el empalme genético ofrece muchas ventajas para la sociedad Los científicos son, con mucho, sus usuarios más frecuentes, estudiando la función de los genes y los productos genéticos. Agregan nuevos genes a los organismos para hacer que las plantas de cultivo sean resistentes a las enfermedades o más nutritivas.
La terapia génica, un tema activo de investigación, proporciona una forma nueva y personalizada de combatir las enfermedades genéticas. Este enfoque es especialmente útil cuando los medicamentos de molécula pequeña no existen. Los científicos también usan el corte y empalme de genes para producir medicamentos basados en proteínas que mejoran la atención médica.
Proceso de empalme de genes
Un gen se empalma ensamblando diferentes segmentos de genes y secuencias de ADN en un producto llamado quimera. Los científicos unen estos fragmentos en una pieza circular de ADN llamada plásmido.
Los científicos usan un proceso complejo para clonar genes del ADN de un organismo. Sin embargo, en décadas de investigación científica, la mayoría de los genes ya existen en un plásmido almacenado en algún laboratorio. Los segmentos genéticos se cortan del ADN original y se unen para formar un nuevo gen. Luego, los investigadores verifican la nueva secuencia para asegurarse de que su posición y orientación en la molécula de ADN son correctas.
Regiones de codificación
La región de codificación del gen define el producto que produce el celda; esto es casi siempre una proteína. La región de codificación de un gen se puede cambiar con mutaciones naturales o artificiales. Estos cambios en el ADN de una célula cambian el funcionamiento de la célula. Los científicos pueden agregar una secuencia de etiqueta para rastrear y estudiar productos genéticos en un organismo. El empalme de genes también crea nuevas secuencias de genes para crear proteínas con funciones múltiples o totalmente nuevas.
Regiones no codificadoras
No todas las partes de un gen controlan la producción de un producto final. Las regiones no codificadoras son igualmente importantes para determinar la función de los genes.
Las secuencias promotoras controlan las formas en que los genes se expresan en una célula. Estas secuencias determinan si un gen siempre se expresa, procesa la célula produce un nutriente particular o si una célula está bajo estrés. El promotor también controla en qué células se expresa un gen. Por ejemplo, un promotor bacteriano no funcionará si se mueve a una célula vegetal o animal.
Las secuencias potenciadoras controlan si la célula produce muchos o solo unos pocos. unidades del producto final del gen. Otras secuencias determinan cuánto tiempo y cuántos productos permanecen en la célula y si la célula excreta productos finales.