He aquí por qué:
* Composición: Los asteroides están compuestos principalmente de roca y metal, al igual que los planetas rocosos. Si bien su composición específica puede variar según su ubicación y formación, generalmente comparten elementos similares.
* Estructura: Los asteroides, como los planetas, son sólidos, no gaseosos o líquidos. Carecen de una atmósfera y tienen una estructura relativamente densa.
* Formación: Se cree que los asteroides son restos del sistema solar temprano, sobrantes del proceso de formación del planeta.
Sin embargo, los asteroides son diferentes de los planetas de estas maneras clave:
* Tamaño: Los asteroides son significativamente más pequeños que los planetas. El asteroide más grande, Ceres, es solo un tercio del tamaño de nuestra luna.
* forma: La mayoría de los asteroides tienen una forma irregular, a diferencia de los planetas esféricos.
* Gravedad: Los asteroides tienen una atracción gravitacional mucho más débil que los planetas, por lo que no pueden aferrarse a una atmósfera.
Entonces, si bien los asteroides son similares a los planetas rocosos en su composición y estructura básicas, son significativamente más pequeños y carecen de las características definitorias de un planeta.