Así es como sucede:
1. Gravedad: Una nebulosa, una nube gigante de gas y polvo, se mantiene unida por la gravedad.
2. Fluctuaciones de densidad: Dentro de la nebulosa, hay ligeras variaciones en la densidad. Las áreas con una densidad ligeramente mayor tienen un tirón gravitacional ligeramente más fuerte.
3. Acreción: Estas áreas más densas atraen más gas y polvo, aumentando aún más su densidad y atracción gravitacional. Este proceso se llama acreción.
4. Formación de Protostar: A medida que se atrae más material, la región central de la nebulosa se vuelve cada vez más caliente y densa. Finalmente, el núcleo se vuelve lo suficientemente caliente como para encender la fusión nuclear, y nace una protostar.
El ProtoStar continuará creciendo y evolucionando, potencialmente convirtiéndose en una estrella de pleno derecho.