Por qué es poco probable:
* vastas distancias: Los planetas en nuestro sistema solar están separados por grandes distancias. Sus órbitas son relativamente estables y predecibles.
* Interacciones gravitacionales: Los planetas influyen en las órbitas de los demás a través de la gravedad, pero estas interacciones generalmente son predecibles y no conducen a colisiones.
* Estabilidad orbital: Los planetas en nuestro sistema solar han estado orbitando el sol durante miles de millones de años, y sus órbitas se han refinado con el tiempo.
Por qué no es imposible:
* Influencias externas: Si bien es muy improbable, un objeto deshonesto de fuera de nuestro sistema solar podría ingresar e interrumpir las órbitas de los planetas, lo que puede conducir a una colisión.
* Comportamiento caótico: Aunque es poco probable, hay una pequeña posibilidad de una inestabilidad caótica a largo plazo en las interacciones gravitacionales entre los planetas. Esto podría conducir a una colisión en escalas de tiempo muy largas.
Lo que es más probable:
* colisiones menores: Es más probable que los objetos más pequeños como los asteroides o los cometas chocen con los planetas.
* Cerrar enfoques: Los planetas pueden acercarse entre sí, lo que lleva a remolcadores gravitacionales y cambios menores en sus órbitas.
En resumen:
Una colisión de planeta en planeta en nuestro sistema solar es increíblemente improbable. Si bien no es imposible, es mucho más probable que los objetos más pequeños afecten los planetas, o que los planetas experimenten encuentros cercanos que afectan sus órbitas.