1. Gravedad:
* El tirón del sol: El sol, siendo el objeto más masivo en nuestro sistema solar, ejerce una fuerte fuerza gravitacional en todos los planetas. Esta fuerza es lo que mantiene a los planetas atados al sol.
* Atracción gravitacional: La fuerza de la gravedad depende de las masas de los objetos y la distancia entre ellos. Cuanto más cerca esté un planeta al sol, más fuerte es la atracción gravitacional.
2. Inercia:
* movimiento en línea recta: Los planetas tienden a moverse en línea recta debido a la inercia, que es la tendencia de un objeto a resistir los cambios en su movimiento. Si la gravedad no actuara, los planetas volarían al espacio en línea recta.
* Camino circular o elíptico: La gravedad constantemente tira de los planetas hacia el sol, haciendo que se desvíen de un camino recto y sigan una trayectoria curva. Este camino curvo es circular o elíptico.
3. Movimiento orbital:
* órbita circular: Algunos planetas, como Venus, tienen órbitas que son casi circulares. Esto significa que su distancia al sol permanece relativamente constante.
* órbita elíptica: La mayoría de los planetas, incluida la Tierra, tienen órbitas elípticas. Esto significa que su distancia al sol varía a lo largo de su órbita. Están más cerca del sol en un punto llamado Perihelion y más lejos en un punto llamado Afelio.
* Período orbital: El tiempo que lleva un planeta completar una revolución completa alrededor del sol se llama su período orbital. Este período varía según la distancia del planeta del Sol. Por ejemplo, la Tierra tarda 365.25 días en completar una órbita, mientras que Mars toma 687 días.
4. El plano de la eclíptica:
* órbitas planas: Los planetas generalmente orbitan el sol en un plano relativamente plano llamado plano de la eclíptica. Es por eso que vemos los planetas alineados con el sol en nuestro cielo nocturno.
* ligas inclinaciones: Mientras que la mayoría de los planetas orbitan en el plano de la eclíptica, pueden tener ligeras inclinaciones o inclinaciones en relación con este plano.
En resumen:
Los planetas se mueven alrededor del sol en órbitas elípticas debido a las fuerzas combinadas de gravedad e inercia. La atracción gravitacional del sol mantiene a los planetas atados a él, mientras que su inercia hace que se muevan en un camino curvo. Este movimiento es relativamente estable y predecible, lo que nos permite mapear las posiciones de los planetas con el tiempo.