He aquí por qué:
* Sistema solar temprano: Durante la formación temprana del sistema solar, los planetas gigantes (Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno) se formaron en las regiones externas donde las temperaturas eran mucho más frías. Esto les permitió capturar y retener grandes cantidades de hidrógeno y helio, los elementos más abundantes del universo.
* gigante de gas: Júpiter, siendo el planeta más grande y masivo de nuestro sistema solar, acumuló una gran cantidad de estos gases, formando una atmósfera gruesa que está compuesta principalmente de hidrógeno (aproximadamente 86%) y helio (aproximadamente 13%).
Si bien Saturno, Urano y Neptuno también tienen atmósferas ricas en hidrógeno y helio, no son tan gruesos como los de Júpiter. Esto se debe a su menor gravedad y un tamaño más pequeño, lo que permitió que algunos de los gases más ligeros escapen con el tiempo.