El gran lugar rojo:
* Un vórtice gigantesco: La tormenta más famosa, la gran mancha roja, es una tormenta anticiclónica masiva (girando en sentido antihorario) que ha estado furioso durante al menos siglos.
* Tamaño: Es tan grande que podría encajar de dos a tres tierras en su diámetro.
* Color: Se cree que el color rojo se debe a trazas de productos químicos en la atmósfera, tal vez desde lo profundo de Júpiter.
* velocidades de viento: Los vientos de la tormenta pueden alcanzar velocidades de más de 400 mph.
* larga: A pesar de ser masivo, el gran lugar rojo se ha reducido en los últimos años, pero sigue siendo una característica poderosa y duradera.
Otras tormentas:
* óvalos blancos y marrones: Júpiter tiene muchas otras tormentas, tanto blancas como marrones, que también son grandes y poderosas.
* Tamaño de la variable: Se cree que los óvalos blancos son tormentas anticiclónicas (giratorias en sentido antihorario), mientras que los óvalos marrones son ciclónicos (girando en sentido horario).
* Formación: Se cree que estos óvalos se forman desde la interacción de las potentes corrientes de chorro de Júpiter.
* fusionando y desapareciendo: Las tormentas pueden fusionarse o desaparecer con el tiempo.
Características únicas:
* Sin superficie sólida: Las tormentas de Júpiter ocurren en la atmósfera gruesa y giratoria del planeta, no en una superficie sólida como la Tierra.
* alimentado por calor interno: Las tormentas son alimentadas por el calor interno de Júpiter, que se genera por la presión gravitacional dentro del planeta.
* Composición atmosférica: Las tormentas están compuestas de hidrógeno, helio, metano, amoníaco y otros gases.
observando las tormentas:
* Telescopios: Incluso los telescopios pequeños pueden mostrar la gran mancha roja de Júpiter y otras características.
* nave espacial: Misiones como Voyager, Galileo, Juno y otras han proporcionado impresionantes imágenes de primer plano de las tormentas de Júpiter.
En resumen, las tormentas de Júpiter son fenómenos increíblemente grandes, poderosos y duraderos que demuestran las inmensas fuerzas en el trabajo dentro de la atmósfera del planeta. Son un testimonio de la naturaleza dinámica del planeta más grande de nuestro sistema solar.