Después del Big Bang, el universo se expandió y enfrió rápidamente, permitiendo que se formaran partículas subatómicas. Con el tiempo, estas partículas subatómicas se combinaron y formaron átomos, moléculas y, finalmente, estrellas, galaxias y la vasta estructura cósmica que observamos hoy.
La línea de tiempo del desarrollo del universo se puede resumir de la siguiente manera:
Época de Planck: Esta fue la primera y más pequeña unidad de tiempo después del Big Bang. Durante este período, que duró desde el momento del Big Bang hasta 10^-43 segundos, el universo era extremadamente caliente y denso, y las leyes de la física tal como las conocemos hoy no se aplicaban.
Época de la Gran Unificación: Esta época siguió a la época de Planck y duró aproximadamente de 10 ^ -36 a 10 ^ -32 segundos. Durante esta etapa, la temperatura del universo comenzó a enfriarse, lo que permitió la formación de partículas subatómicas como quarks y gluones.
Época electrodébil: La siguiente fase, que duró de 10^-32 a 10^-10 segundos, estuvo marcada por la unificación de las fuerzas electromagnética y débil. Esto llevó a la separación de los quarks en protones y neutrones y a la formación de electrones, positrones, neutrinos y antineutrinos.
Época inflacionaria: Este período de rápida expansión duró aproximadamente de 10^-35 segundos a 10^-32 segundos. Durante esta etapa, el universo se expandió a un ritmo exponencial, estirándolo a su tamaño actual y preparando el escenario para la formación de galaxias y estructuras cósmicas.
Enfriamiento y formación de materia: A medida que el universo continuó expandiéndose y enfriándose, los protones y neutrones se combinaron para formar núcleos atómicos. Se crearon los primeros átomos, compuestos de hidrógeno, helio y algo de litio. Estos átomos formaron el gas primordial que finalmente colapsó bajo la gravedad para formar estrellas y galaxias.
Formación de la estructura cósmica: Durante miles de millones de años, las interacciones gravitacionales provocaron que las nubes de gas primordiales se condensaran y fragmentaran, formando estrellas y galaxias. Las estructuras cósmicas que observamos hoy, incluidas estrellas, galaxias, cúmulos de galaxias y supercúmulos, evolucionaron a través de interacciones gravitacionales y fusiones de estas estructuras tempranas.
Vale la pena señalar que nuestra comprensión de las primeras etapas del universo y la línea temporal de su evolución proviene de teorías y modelos científicos. Si bien estos modelos han sido ampliamente probados y perfeccionados basándose en observaciones y cálculos teóricos, todavía hay aspectos del origen y la evolución del universo que siguen siendo objeto de investigación y exploración científica en curso.