Urano aparece de color azul cian, mientras que Neptuno aparece de color azul oscuro. El color azul de ambos planetas se debe a la absorción de luz roja por las moléculas de metano en la atmósfera. Sin embargo, la atmósfera de Urano también contiene amoníaco y vapor de agua, que dispersan la luz azul con mayor eficacia que el metano. Esto le da a Urano una apariencia cian.
La atmósfera de Neptuno, por el contrario, contiene más sulfuro de hidrógeno. Las moléculas de sulfuro de hidrógeno absorben la luz azul de manera más efectiva que el metano, por lo que Neptuno aparece de un azul más oscuro. Además, la atmósfera de Neptuno es más nebulosa que la de Urano, lo que también contribuye a su apariencia más oscura.
Los diferentes colores de Urano y Neptuno son un recordatorio de que todos los planetas de nuestro sistema solar son únicos. Cada planeta tiene su propia composición, atmósfera y apariencia.