1. Restos de supernova: El JWST puede estudiar restos de supernovas, que son restos de estrellas masivas que han explotado. Al analizar la composición y las características de estos remanentes, los científicos pueden obtener información sobre los elementos y moléculas que están presentes después de la muerte de una estrella. Esta información puede arrojar luz sobre la posible supervivencia de moléculas orgánicas o incluso de vida microbiana en entornos tan hostiles.
2. Nebulosas Planetarias: Las nebulosas planetarias son capas brillantes de gas y polvo expulsadas de estrellas moribundas. Las observaciones infrarrojas de alta resolución del JWST pueden revelar la composición química y la dinámica de estas nebulosas, proporcionando pistas sobre los elementos disponibles para la posible formación de planetas. Al estudiar la química de estas nebulosas, los científicos pueden evaluar si las condiciones son propicias para la formación de moléculas que sustentan la vida.
3. Exoplanetas alrededor de enanas blancas: Las enanas blancas son núcleos colapsados de estrellas que han agotado su combustible nuclear. Se sabe que algunas enanas blancas tienen planetas orbitando alrededor de ellas, conocidos como "planetas enanas blancas". El JWST puede potencialmente detectar y caracterizar estos planetas, ofreciendo información sobre su habitabilidad y la posibilidad de que la vida sobreviva a la evolución de sus estrellas anfitrionas.
4. Modelos de evolución estelar: Las observaciones del JWST pueden contribuir a perfeccionar los modelos de evolución estelar, que describen el ciclo de vida de las estrellas y su destino final. Estos modelos pueden ayudar a los científicos a comprender las condiciones bajo las cuales diferentes tipos de estrellas experimentan supernovas, así como la posterior formación de nebulosas planetarias y enanas blancas. Los modelos mejorados pueden proporcionar una mejor comprensión del potencial de supervivencia de la vida alrededor de estrellas envejecidas.
5. Espectroscopia y biofirmas: El JWST está equipado con capacidades espectroscópicas avanzadas que le permiten analizar la luz proveniente de objetos celestes e identificar las huellas químicas de varios elementos y moléculas. Al estudiar los espectros de restos de supernovas, nebulosas planetarias y exoplanetas alrededor de enanas blancas, el JWST puede potencialmente detectar biofirmas (indicadores de la presencia de vida) que pueden haber sobrevivido o surgido después de la muerte de una estrella.
Si bien las observaciones del JWST por sí solas pueden no proporcionar respuestas definitivas sobre la supervivencia de la vida después de la muerte de una estrella, pueden contribuir enormemente a nuestra comprensión de los entornos y condiciones extremos que pueden existir durante y después de la evolución estelar. Este conocimiento ayudará a los científicos a perfeccionar sus teorías y estrategias de búsqueda de vida potencial más allá de nuestro sistema solar.