Formación de nanocables funcionalizados mediante el control del autoensamblaje de péptidos amiloides modificados "
Investigadores de Japón y EE. UU. Han desarrollado una nueva técnica para crear de manera eficiente nanocables funcionalizados por primera vez.
El profesor Sakaguchi y su equipo en la Escuela de Graduados en Ciencias, Universidad de Hokkaido, junto con MANA PI Prof. Kohei Uosaki y un grupo de investigación de la Universidad de California, Santa Bárbara, han desarrollado con éxito una nueva técnica para la creación eficiente de nanocables funcionalizados por primera vez.
El grupo se centró en la propensión natural de los péptidos amiloides, moléculas que se cree que causan la enfermedad de Alzheimer, autoensamblarse en nanocables en una solución acuosa y controlar esta propiedad molecular para lograr su hazaña.
Los nanocables funcionalizados son extremadamente importantes en la construcción de nanodispositivos porque son prometedores para su uso como circuitos integrados y para la generación de propiedades novedosas. como la conductividad, catalizadores y propiedades ópticas que se derivan de su fina estructura. Sin embargo, algunos han señalado las limitaciones técnicas y financieras de la tecnología de microfabricación necesaria para crear estas estructuras. Mientras tanto, la autoorganización y funcionalización molecular han atraído la atención en el campo del desarrollo de la nanotecnología de próxima generación. Péptidos amiloides, que se cree que causan la enfermedad de Alzheimer, poseen la capacidad de autoensamblarse en nanocables altamente estables en una solución acuosa. Centrándonos en esto, El equipo de investigación se convirtió en el primero en desarrollar con éxito un nuevo método para crear de manera eficiente un nanoalambre multifuncional mediante el control de esta propiedad molecular.
El equipo diseñó un nuevo péptido llamado SCAP, o péptido amiloide de estructura controlable, terminado con un casquete de residuos de tres aminoácidos. Al combinar varios SCAP con diferentes límites, el equipo descubrió que la autoorganización está muy controlada a nivel molecular. Usando este nuevo método de control, el equipo formó un nanoalambre molecular con la relación de aspecto más grande jamás lograda. Además, hicieron modificaciones utilizando varias moléculas funcionales, incluidos metales, semiconductores y biomoléculas que produjeron con éxito un nanoalambre funcionalizado de muy alta calidad. Avanzando, Se espera que este método contribuya significativamente al desarrollo de nuevos nanodispositivos mediante su aplicación a una amplia gama de nanomateriales funcionales con propiedades de autoorganización.