1. Fase gigante roja:
* en aproximadamente 5 mil millones de años: El sol se quedará sin combustible de hidrógeno en su núcleo, lo que hace que comience a fusionar el helio. Esto hará que el sol se hinche en un gigante rojo, cada vez más grande y más fresco.
* El destino de la Tierra: El sol envolverá a Mercurio y Venus. El destino de la Tierra es menos seguro. Podría ser empujado más hacia una órbita más fría y oscura, o podría ser completamente tragada por el sol en expansión. Incluso si la Tierra sobrevive, se volverá inhabitable debido al intenso calor y radiación.
2. Enano blanco:
* Después de la fase gigante roja: El sol arrojará sus capas externas, dejando atrás un núcleo denso y caliente llamado enano blanco. Este enano blanco será del tamaño de la Tierra pero increíblemente denso.
* El destino de la Tierra: Si la Tierra sobrevive a la fase gigante roja, será un mundo estéril y congelado que orbita a un enano blanco. Cualquier vida restante se extinguiría durante mucho tiempo.
3. Enfriamiento y desvanecimiento:
* Más de miles de millones de años: El enano blanco se enfriará lentamente, eventualmente desaparecer en un enano negro, un remanente frío y oscuro del sol.
Consecuencias para la Tierra:
* No más luz solar: La vida como sabemos sería imposible sin la energía del sol. Las plantas morirían, y la temperatura de la Tierra caería.
* Sin agua líquida: Los océanos se congelarían y la atmósfera se diluiría.
* No más temporadas: Las estaciones de la Tierra son causadas por la energía del sol. Sin el sol, no habría cambios en las estaciones.
* El campo magnético de la Tierra debilitaría: El campo magnético del sol protege la Tierra de la radiación nociva. Sin el sol, el campo magnético de la Tierra se debilitaría, dejándolo vulnerable a las bengalas solares y otra radiación peligrosa.
Resumen: La muerte del sol será un evento significativo en la historia de la Tierra, lo que finalmente conduce al final de la vida tal como la conocemos. La tierra se convertirá en un mundo frío y árido que orbita a un enano blanco, eventualmente desvaneciéndose en un remanente frío y oscuro.