Un equipo de investigadores ha descubierto por qué una posible vacuna contra los virus del dengue y el Zika no logra proteger a las personas en climas tropicales. Los hallazgos, publicados en la revista _Science Translational Medicine_, podrían conducir al desarrollo de vacunas más eficaces contra estas enfermedades transmitidas por mosquitos.
Los virus del dengue y el Zika son flavivirus estrechamente relacionados que causan síntomas similares, como fiebre, sarpullido y dolores musculares. El virus del dengue también puede causar complicaciones más graves, como la fiebre hemorrágica del dengue y el síndrome de shock del dengue. El virus Zika puede causar microcefalia, un defecto congénito en el que los bebés nacen con cabezas anormalmente pequeñas.
No existe un tratamiento específico para la infección por el virus del dengue o del Zika. La mejor forma de prevenir estas enfermedades es evitar las picaduras de mosquitos. Sin embargo, esto puede resultar difícil en los climas tropicales, donde abundan los mosquitos.
Los científicos llevan muchos años trabajando en el desarrollo de vacunas contra los virus del dengue y el Zika. Sin embargo, estas vacunas han sido sólo parcialmente efectivas. Una de las razones es que los virus pueden mutar rápidamente, lo que significa que las vacunas pueden quedar obsoletas rápidamente.
El equipo de investigación, dirigido por científicos de la Rama Médica de la Universidad de Texas en Galveston, descubrió que la temperatura corporal desempeña un papel en la eficacia de las vacunas contra el dengue y el virus del Zika.
En experimentos, los investigadores encontraron que las vacunas eran menos efectivas en ratones mantenidos a una temperatura corporal de 37 grados Celsius (98,6 grados Fahrenheit) que en ratones mantenidos a una temperatura corporal de 33 grados Celsius (91,4 grados Fahrenheit).
Los investigadores creen que una temperatura corporal más alta inhibe la producción de anticuerpos, que son esenciales para combatir las infecciones.
"Nuestros hallazgos proporcionan una nueva comprensión de por qué las vacunas contra el dengue y el Zika son menos efectivas en los climas tropicales", afirmó el Dr. Pei-Yong Shi, autor principal del estudio. "Esta información podría conducir al desarrollo de vacunas más eficaces que puedan proteger a las personas en estas regiones".
Los investigadores ahora están trabajando en el desarrollo de una nueva vacuna contra el dengue y el virus del Zika que sea más eficaz en climas tropicales.