* Transformación de energía: Cuando cae la pelota, su energía potencial (debido a su altura) se convierte en energía cinética (energía de movimiento).
* Colisión inelástica: Cuando la pelota golpea el suelo, parte de esta energía se transforma en otras formas, como el calor y el sonido, debido a la elasticidad imperfecta de la pelota de goma.
* Energía potencial reducida: La energía cinética restante se usa para impulsar la bola, pero debido a que se perdió cierta energía, no alcanza la altura original. Esto significa que tiene menos energía potencial.
El punto clave es que la energía no se destruye; se transfiere a otras formas. La cantidad total de energía en el sistema permanece constante, a pesar de que la energía potencial de la pelota disminuye con cada rebote.
Piense en ello así:imagine un automóvil que viaja por una carretera. Pierde algo de energía debido a la fricción con la carretera y la resistencia al aire. El auto se ralentiza, pero la energía no ha desaparecido. Se ha transformado en calor y sonido.
La pelota que rebota es un gran ejemplo de cómo la energía se convierte constantemente y se transfiere, ¡pero nunca se pierde realmente!