* Resistencia del aire: Este es el mayor culpable. Las moléculas de aire chocan con la pelota, creando una fuerza de arrastre que se opone a su movimiento. Cuanto más rápido viaja la pelota, mayor se vuelve esta fuerza.
* viento: Si hay viento, empujará la pelota del curso, afectando tanto su distancia horizontal como su ruta de vuelo.
* Spin: Incluso un ligero giro en la pelota influirá en su trayectoria debido al efecto Magnus, lo que causa una fuerza perpendicular tanto al giro como a la dirección del movimiento.
* Condiciones de lanzamiento no ideales: Las ecuaciones de física asumen un lanzamiento perfecto sin giro inicial y una trayectoria perfectamente vertical. En realidad, la pelota podría no lanzarse exactamente como se pretendía.
* Rotación de la Tierra: La rotación de la Tierra también afecta la trayectoria de la pelota, aunque este efecto suele ser insignificante.
Es importante recordar que las ecuaciones de física proporcionan modelos idealizados. Los escenarios del mundo real siempre implican complejidades adicionales que no se tienen en cuenta en estos modelos.