Cada partícula de materia en el universo atrae a cualquier otra partícula con una fuerza que es:
* proporcional al producto de sus masas: Cuanto más masivos son los objetos, más fuerte es la fuerza gravitacional entre ellos.
* Inversamente proporcional al cuadrado de la distancia entre sus centros: Cuanto más separados están los objetos, más débil es la fuerza gravitacional.
Esto puede representarse matemáticamente como:
f =g * (m1 * m2) / r^2
Dónde:
* f es la fuerza de la gravedad
* g es la constante gravitacional (aproximadamente 6.674 x 10^-11 n m^2/kg^2)
* m1 y m2 son las masas de los dos objetos
* r es la distancia entre los centros de los dos objetos
En términos más simples:
Imagina dos bolas de bolos. Cuanto más pesado son las bolas de bolos, más fuerte es la fuerza gravitacional entre ellas. Cuanto más separados estén, más débil es la fuerza. Esta fuerza es lo que nos mantiene castigados en la tierra, lo que hace que los planetas orbiten el sol y lo que gobierna el movimiento de las galaxias.