Estos gases que se mueven rápidamente pueden viajar a través del vacío del espacio debido a su alta energía térmica. Las partículas dentro de las nubes moleculares están en un estado de movimiento constante, chocan entre sí y poseen una alta energía cinética. Esta energía proporciona el impulso necesario para superar la atracción gravitacional de su entorno, lo que les permite derivar y moverse por el espacio.
La existencia de gases que se mueven rápidamente en el medio interestelar es crucial para el proceso continuo de formación estelar y evolución cósmica. Las nubes moleculares son componentes esenciales para comprender diversos fenómenos astrofísicos, incluida la formación de sistemas estelares, la evolución de las galaxias y la composición química del universo.