Los objetos en caída libre aceleran a una velocidad constante de 9,8 metros por segundo al cuadrado (32 pies por segundo al cuadrado) en la Tierra. Esto significa que su velocidad aumenta 9,8 metros por segundo (32 pies por segundo) cada segundo.
El movimiento horizontal no afecta la aceleración de la gravedad. Ya sea que un objeto se mueva horizontal o verticalmente, caerá al mismo ritmo.
Por ejemplo, si se dejan caer dos bolas desde la misma altura, una moviéndose horizontalmente y la otra verticalmente, ambas llegarán al suelo al mismo tiempo.