La radiación electromagnética en grandes cantidades puede ser peligrosa para los sistemas biológicos, incluidos los cuerpos humanos. Esta es una fuente de preocupación dada la fracción considerable de la población que vive cerca de líneas de alta tensión, por encima del suelo, también conocidas como cables de alta tensión. Varias personas usan la "evidencia" de Internet para afirmar que vivir cerca de cables de alta tensión puede causar dolencias graves, pero la historia real aún no se conoce. A pesar de esa controversia, los efectos de la radiación electromagnética que emana de las líneas eléctricas son de particular interés para los neurocientíficos, porque el cerebro mismo opera enviando una forma de señal eléctrica entre las neuronas y los tejidos objetivo fuera del sistema nervioso central. Decidir qué tan lejos de estos cables es "seguro" requiere clasificar a través de la evidencia disponible.
TL; DR (demasiado largo; no leído)
La distancia mínima de seguridad de los sistemas eléctricos de alta tensión los cables varían si su preocupación es por su salud general. Para las personas que trabajan cerca de cables eléctricos, al menos una empresa de servicios públicos aconseja mantener todos los equipos de menos de 14 pies de altura cuando se encuentran cerca de líneas eléctricas.
¿Qué es la radiación electromagnética?
Campos eléctricos y campos magnéticos, que están relacionados pero físicamente distintos, son creados por cualquier cosa que lleve corriente eléctrica, desde líneas de alta tensión hasta el cableado en hogares y electrodomésticos. La magnitud o fuerza de estos campos disminuye rápidamente al aumentar la distancia desde la fuente que los crea.
La radiación electromagnética también emana de fuentes en el espacio exterior, incluido el sol y otras estrellas y las microondas que viajan libremente por todo el cosmos. Tanto la luz visible como la "luz" invisible (p. Ej., Infrarroja y ultravioleta) constituyen otros ejemplos. Los campos eléctricos interactúan con los sistemas biológicos, incluidos los cuerpos humanos, de manera diferente a los campos magnéticos.
Riesgos para la salud de los campos eléctricos
A pesar del amplio discurso público sobre los riesgos para la salud de los campos eléctricos y magnéticos, poco o nada Existe evidencia concluyente de que estos son dañinos en cantidades resultantes de la exposición a fuentes cotidianas, incluidos los cables de alta tensión instalados adecuadamente en entornos residenciales y comerciales.
En campos eléctricos que son muchas potencias de diez más fuertes que las que generalmente existen debajo de las líneas eléctricas comunes, las personas que tocan un objeto de metal grande, como un autobús, pueden experimentar un choque transitorio. De lo contrario, no se han reportado efectos en la salud. Lo mismo ocurre con los campos magnéticos, aunque algunos estudios han identificado pequeños cambios en los niveles de calcio celular, la producción de hormonas y el crecimiento celular.
Hay personas que afirman estar afectadas por una afección llamada hipersensibilidad electromagnética o EHS, pero aún no se ha encontrado evidencia concreta de efectos negativos en la investigación. Los síntomas de EHS varían desde náuseas y erupciones cutáneas hasta dolores musculares. La Organización Mundial de la Salud señaló en 2005 que la investigación no ha podido replicar los síntomas en personas con EHS; En múltiples estudios, los sujetos no pudieron detectar campos electromagnéticos con más precisión que los sujetos que no tenían EHS. Sin embargo, en 2015, una revisión de la literatura en "Reviews on Environmental Health" describió resultados mixtos, algunos de los estudios revisados no encontraron ningún vínculo y otros encontraron cambios biológicos mínimos después de la exposición.
Resumen de la evidencia
Si vives cerca de líneas eléctricas de alta tensión, tu salud, según el cuerpo de la investigación actual, no está realmente en riesgo por los campos producidos.
Sin embargo, mientras que los campos eléctricos y magnéticos que emanan de los cables de alta tensión Los investigadores médicos no los consideran peligrosos, esto no hace que estas construcciones sean seguras en el sentido global, ya que el contacto directo puede causar descargas Evite acercarse a sí mismo o cualquier cosa que esté sosteniendo demasiado cerca de los cables de alta tensión. Además, no intente pasar por debajo de una línea eléctrica con ningún objeto, incluido un vehículo, que pueda acercarse a estos cables. De acuerdo con la Administración de Energía de Bonneville en Oregón, como regla general, cuando esté debajo de una línea, no debe colocarse ni a ningún objeto a una altura superior a 14 pies sobre el suelo cuando esté cerca de líneas eléctricas.