Hay dos versiones principales del principio antrópico:
1. Principio antrópico débil: Este afirma que el universo debe tener condiciones adecuadas para la existencia de vida inteligente porque si no las tuviese, no estaríamos aquí para observarla. En otras palabras, el universo es compatible con nuestra existencia.
2. Principio Antrópico Fuerte: Éste propone que el universo está diseñado o seleccionado específicamente para la existencia de vida inteligente. Sugiere que ciertas constantes y leyes del universo están ajustadas para permitir la formación y evolución de estructuras complejas como estrellas, galaxias y la vida misma.
El principio antrópico es controvertido porque plantea preguntas sobre el significado y el propósito de la vida humana en el cosmos. También desafía las explicaciones científicas tradicionales al introducir perspectivas filosóficas y teológicas en las discusiones científicas sobre el universo. Si bien algunos científicos y filósofos lo encuentran intrigante, otros argumentan que carece de hipótesis comprobables y es más bien una conjetura metafísica.