La masa, el volumen y la densidad son tres de las propiedades más básicas de un objeto. La masa es lo pesado que es algo, el volumen te dice qué tan grande es, y la densidad es la masa dividida por el volumen. Aunque la masa y el volumen son propiedades con las que lidiar todos los días, la idea de la densidad es un poco menos obvia y toma una reflexión cuidadosa. Sin embargo, una vez que te acostumbras, la densidad es muy útil.
TL; DR (Demasiado largo; No lo leí)
El volumen es del tamaño de un objeto, y la masa es su peso Para obtener densidad, divida la masa por volumen. Por ejemplo, un ladrillo de plomo, de 5 cm x 2 cm x 10 cm, pesa 1.134 g. El volumen del ladrillo es de 5 x 2 x 10 = 100 cm cúbicos. Divide 1,134 por 100 para obtener la densidad de plomo, 11,34 gramos por centímetro cúbico.
¿Misa: un misterio?
La masa no se comprende por completo, por lo que se define de dos maneras muy diferentes: La masa inercial mide la fuerza con que un objeto resiste la aceleración, mientras que la masa gravitacional mide la fuerza con que un objeto atrae a otras cosas hacia sí mismo. No está claro por qué estos dos tipos diferentes de masa son iguales, pero los experimentos confirman que sí lo son. Estrictamente hablando, una báscula mide el peso, pero generalmente se puede pensar que el peso y la masa son lo mismo.
Espacio y volumen
El volumen mide el tamaño espacial de un objeto. Aunque la fórmula utilizada para calcular el volumen depende de su forma y puede ser complicada, se puede considerar generalmente como ancho por alto por longitud. Medir el volumen de un objeto a veces puede ser más fácil que calcularlo. Ponerlo en un recipiente grande de agua y medir el aumento en el nivel del agua puede encontrar rápidamente el volumen, sin importar la forma en que se encuentre.
Divide for Density
La densidad se calcula dividiendo el objeto masa por su volumen. La densidad es menos intuitiva que la masa o el volumen, pero si alguna vez has recogido un objeto y lo encuentras mucho más ligero o más pesado de lo que esperabas, es porque su densidad no es lo que pensabas. La densidad por lo general no se puede medir directamente y debe calcularse después de determinar la masa y el volumen. La densidad a veces se usa para describir otras cantidades divididas por volumen, como la densidad de energía.
La densidad como una constante
Los científicos e ingenieros utilizan frecuentemente la densidad, ya que es útil para calcular las propiedades de un objeto y identificando los materiales de los que está hecho un objeto. Las densidades de miles de sustancias, incluidos metales, plásticos y más, son bien conocidas. A temperatura y presión ambiente, la densidad de una sustancia dada es casi siempre constante: una uña de hierro y un ancla de hierro para el barco tienen la misma densidad, aunque son cosas muy diferentes. Después de calcular la densidad de un objeto, un científico puede ver el valor en una tabla y en muchos casos determinar con precisión de qué está hecho el objeto.
Gran Descubrimiento de Archimedes
Uno de los más famosos ejemplos de densidad calculada es la historia de Arquímedes y la corona de oro. Un rey le había pedido a Arquímedes que determinara si su nueva corona estaba hecha de oro puro, pero sin dañarla de ninguna manera. Arquímedes se dio cuenta de que al sumergir la corona en el agua, él podía determinar su volumen y, por lo tanto, su densidad. De esta forma, probó que la corona no era de oro puro, sino que tenía metales más baratos.