He aquí por qué:
* El aislamiento geográfico es necesario pero no suficiente: Las barreras geográficas, como montañas, ríos u océanos, evitan el flujo de genes entre las poblaciones. Este aislamiento es el primer paso hacia la especiación, pero no es suficiente.
* La divergencia genética es esencial: Una vez separadas, las poblaciones deben acumular suficientes diferencias genéticas para aislarse reproductivamente. Esto puede ocurrir a través de:
* Drift genética: Cambios aleatorios en las frecuencias de alelos debido a eventos casuales.
* Selección natural: Diferentes entornos a ambos lados de la barrera pueden favorecer diferentes rasgos, lo que lleva a la divergencia.
* Mutación: Los cambios aleatorios en el ADN pueden crear nuevas variaciones.
* Aislamiento reproductivo: Para que dos poblaciones se consideren especies distintas, deben aislarse reproductivamente. Esto significa que no pueden interbrearse y producir descendientes fértiles. El aislamiento reproductivo puede surgir debido a:
* Barreras prebigóticas: Factores que evitan el apareamiento o la fertilización (por ejemplo, diferentes rituales de apareamiento, órganos reproductivos incompatibles).
* Barreras poscigóticas: Factores que evitan que la descendencia híbrida sobreviva o se reproduzca (por ejemplo, esterilidad híbrida).
* El tiempo es un factor: La especiación lleva tiempo. La cantidad de tiempo requerida depende de la tasa de cambio genético, la fuerza de las presiones selectivas y el tamaño de las poblaciones aisladas.
Por lo tanto, si bien las barreras geográficas son importantes, no son el único factor que determina si surgirán o no nuevas especies. El proceso de especiación requiere una interacción compleja de divergencia genética, aislamiento reproductivo y tiempo suficiente.