Las hojas de los enebros están cubiertas por una capa cerosa que ayuda a reducir la pérdida de agua por transpiración, lo que permite a los árboles conservar agua.
Raíces profundas:
Los enebros tienen extensos sistemas de raíces que pueden llegar profundamente al suelo para acceder a fuentes de agua subterránea.
Hojas pequeñas:
Los enebros tienen hojas pequeñas en forma de escamas que reducen la superficie de la cual se puede evaporar el agua, minimizando aún más la pérdida de agua.
Corteza gruesa:
La gruesa corteza de los enebros actúa como una barrera adicional a la pérdida de agua al reducir la evaporación del tronco y las ramas.
Uso eficiente del agua:
Los enebros han desarrollado mecanismos eficientes de uso del agua, como la conductancia estomática reducida, que les permite realizar la fotosíntesis y crecer con menos agua.
Capacidad para almacenar agua:
Algunas especies de enebro tienen la capacidad de almacenar agua en sus tejidos, lo que les permite sobrevivir a períodos de sequía.
Tolerancia a la sequía:
Con el tiempo, los enebros han desarrollado adaptaciones y tolerancia a las condiciones áridas, lo que les permite prosperar en ambientes secos con disponibilidad limitada de agua.