Los peces son diversos: cada especie ha evolucionado para vivir con éxito en su entorno submarino específico, desde arroyos y lagos hasta la vasta extensión del océano. Sin embargo, todos los peces comparten algunas adaptaciones evolutivas comunes que les ayudan a prosperar en su dominio acuoso. Las especies de peces también varían de otras criaturas acuáticas, como las ballenas y los delfines (que son mamíferos) y las tortugas (que son reptiles). El océano, solo, alberga alrededor de 18,000 especies de peces, que los humanos conocen, y hay muchos más científicos que aún no han descubierto. Si bien hay algunas excepciones a estas reglas, a continuación se incluye una lista de los rasgos comunes en estos animales acuáticos.
Cómo respiran los peces bajo el agua
Todos los peces tienen branquias presentes desde el momento en que nacen hasta ellos mueren. Las branquias son órganos importantes para un pez, ya que son como respiran los peces. Ayudan a absorber el oxígeno del agua y emiten dióxido de carbono. Las branquias están ubicadas a ambos lados de la cabeza del pez.
Los peces tienen sangre fría
Los peces son ectotermos o especies de sangre fría. No pueden regular su temperatura corporal y dependen del ambiente externo para obtener su calor. La temperatura del cuerpo de un pez fluctúa de acuerdo con la temperatura del agua y, como las lagartijas, el agua fría puede hacer que se vuelvan lentas. Algunos peces en cuerpos de agua más fríos, como los lagos, permanecerán inactivos durante los meses de invierno.
Los peces pueden detectar movimientos cercanos
Los peces tienen un órgano sensorial especializado llamado línea lateral que corre a lo largo del cuerpo. Situado justo debajo de las escalas, se compone de conductos que se llenan con un fluido. La línea lateral puede detectar vibraciones y movimientos en el agua. Incluso si no hay luz, los peces pueden detectar alimentos y depredadores, e incluso navegar con la ayuda de este órgano especializado.
Nadar vejigas ayudar a dormir peces
Todos los peces tienen vejiga natatoria, que está lleno de aire y ayuda a garantizar que el pez mantenga una flotabilidad estable en el agua, sin hundirse ni flotar demasiado. La presencia de una vejiga natatoria permite que los peces duerman en el agua sin hundirse en el fondo de su hábitat. En algunas especies de peces, el aire es tragado y enviado a la vejiga natatoria. Esta adaptación también ayuda a los peces a sobrevivir en aguas que no tienen niveles adecuados de oxígeno.
Las aletas propulsan los peces a través del agua
Las aletas son comunes a todos los peces. Las aletas pectorales y pectorales permiten que los peces maniobren y mantengan su estabilidad mientras que las aletas dorsales y ventrales reducen el movimiento de balanceo mientras el pez nada y ayuda a los peces durante los giros. La aleta caudal impulsa al pez hacia adelante mientras nada.