Existen dos categorías principales de recursos: renovables y no renovables. A diferencia de los recursos no renovables, que disminuyen con su uso constante, los recursos renovables no lo hacen. Los recursos no renovables, si no se gestionan adecuadamente, pueden dejar de existir. Esto se debe a que la velocidad a la que se usan es mucho más alta que la velocidad a la que se reemplazan. Los recursos renovables incluyen agua, energía geotérmica y energía eólica. Los recursos no renovables incluyen carbón, gas natural y petróleo.
Gestión del agua
El agua es el recurso natural más abundante en el mundo. De hecho, cubre hasta el 70.9 por ciento de la superficie de la Tierra. Sin embargo, es importante tener en cuenta que solo cerca del 3 por ciento del agua está fresca y, de esto, solo está disponible menos del 1 por ciento para uso humano directo. Por lo tanto, es importante administrar el agua de manera eficiente. El manejo adecuado del agua se logra mediante el tratamiento del agua tanto a pequeña como a gran escala. Las aguas negras y grises, efluentes industriales y aguas pluviales pueden someterse a tratamiento. El tratamiento del agua lo devuelve a su estado original tanto para uso doméstico como industrial o para su eliminación segura. El tratamiento del agua es esencial, ya que garantiza que haya suficiente agua para uso humano. La gestión del agua también se logra mediante un cambio en el estilo de vida. Usar solo la cantidad de agua que necesita y no dejar los grifos en funcionamiento le ayudará mucho a conservar el agua.
Reduzca, Recicle y Reutilice
Reciclar y reutilizar son mejores alternativas a la eliminación de agua algunas cosas. Para una mejor gestión y una utilización eficiente de los recursos, la reducción en la cantidad de uso es importante. Una mejor eficiencia constituye un cambio de estilo de vida que a su vez significa menos desperdicio. No solo son formas de reciclaje y reutilización de recursos, sino que también son importantes para prevenir la contaminación. La eliminación descuidada de sustancias como plásticos, cerámica, aceite, porcelana y metales tiene efectos devastadores en el suelo y el agua. Además, estos desechos peligrosos podrían tener serios efectos tanto en la tierra como en las formas de vida acuática. Estos materiales son inorgánicos, lo que implica que las bacterias no pueden descomponerlos. En lugar de eliminar, reciclar y reutilizar estas sustancias son opciones mucho mejores. Cuando los aceites, por ejemplo, se reciclan, generan diferentes grados de aceite que tienen diferentes aplicaciones. El papel usado que tampoco es biodegradable se recicla en diferentes usos, como el papel tisú.
Leyes y reglamentos
La implementación de leyes y regulaciones para frenar el desperdicio de recursos es importante en la gestión de los recursos. . Estas leyes y regulaciones iluminan a las personas sobre la necesidad de conservar los recursos para las generaciones futuras. La invocación de fuertes sanciones para las personas que no se adhieren a las leyes y reglamentos hará que las personas eviten el desperdicio de recursos. Se espera que tanto el gobierno como las instituciones privadas anuncien en los medios y en cualquier otra plataforma la importancia de una gestión adecuada de los recursos.
Transporte masivo y vehículos híbridos
Casi todos los vehículos usan combustibles fósiles para moverse de un lugar a otro. Desalentar a las personas a usar automóviles individuales es una gran ayuda para reducir la cantidad de combustible que se consume en la escena global. Los autobuses y trenes son alternativas a los vehículos personales porque tienen una relación persona-combustible menor. Esto asegura que los pocos depósitos de combustibles fósiles disponibles en el mundo no se agoten, mientras que al mismo tiempo frena la excesiva contaminación de la atmósfera. Para las personas que no prefieren el transporte masivo, los vehículos híbridos que utilizan fuentes alternativas de energía, como el butanol y el etanol, son una opción viable. El etanol y el butanol están fácilmente disponibles ya que se derivan de productos agrícolas como el maíz.