La madera es uno de los combustibles más antiguos del hombre y se usa para calentar y cocinar. En algunas áreas, donde la quema de madera puede no ser esencial para la supervivencia, todavía se utiliza para ahorrar en costos de calefacción, para uso de emergencia o como un pasatiempo nostálgico que se remonta a nuestros antepasados. Cualquiera sea la razón, un proyecto de ciencia que determina las diferencias en los factores de combustión de varias especies de madera puede ser una experiencia significativa.
La teoría
Hay cientos de especies de árboles en la tierra; toda la madera de estos árboles se quemará. Sin embargo, la madera de cada especie de árbol difiere en algún grado. Especies estrechamente relacionadas, como el pino blanco y el pino rojo, se espera que ardan de manera similar. Se esperaría que las especies no relacionadas, como el nogal americano y el cedro rojo, exhiban diferencias mensurables cuando se queman. Documentar estas diferencias produciría un proyecto de ciencia interesante.
Qué medir
La tasa de quemadas puede significar dos cosas, y ambas son fáciles de medir. Una medida es qué tan rápido un tipo de madera se calentará a su punto de inflamación y estallará en llamas. El segundo es cuánto tardará la madera en quemarse hasta que se consuma por completo.
El experimento
Compre una pequeña pieza de madera blanda, como pino, abeto, cedro o abeto. y otra pieza de madera dura, como roble, nogal americano o arce, de un almacén de maderas. La compra de un almacén de madera asegurará que la madera estará igualmente seca o sazonada, de modo que el contenido de humedad no distorsione los resultados. Las maderas duras y las maderas blandas tienen más probabilidades de exhibir diferentes características de combustión, lo que hace que los resultados sean más fáciles de medir. Corta cada pieza de madera del mismo tamaño; un cubo que mide exactamente 1 pulgada a lo largo de cada borde es perfecto.
Coloque una placa de metal sobre un mechero Bunsen, coloque uno de los bloques de madera en la placa y encienda el quemador. Tan pronto como el quemador esté encendido, comenzará a calentarse, comenzará a cronometrar el proceso con un cronómetro. Eventualmente, cuando la placa de metal se calienta a la temperatura de combustión de la madera, estallará en llamas. Apague inmediatamente la calefacción y anote la hora en el reloj. Continúe el cronometraje y mire hasta que el cubo de madera se extinga después de quemar completamente y tenga en cuenta la hora. Repita con la otra muestra de madera y compare los tiempos.
Si lo desea, se pueden analizar varias especies de madera.
Interpretando los resultados
Los resultados inmediatos pueden ser expresado en un cuadro que muestra el tiempo que tarda la muestra en comenzar a quemarse y cuánto tarda la muestra en quemarse por completo. Si desea interpretar los resultados, haga coincidir las tasas de combustión con la tasa de crecimiento promedio para las especies de madera que se están probando y tenga en cuenta las correlaciones.