Las bacterias son organismos pequeños, unicelulares, beneficiosos y nocivos para los seres humanos. Algunas formas de bacterias nos ayudan a vivir, como las que ayudan a descomponer los alimentos en nuestros intestinos. Otras formas, como la bacteria que causa la peste bubónica, pueden matar a una persona si no se trata. Hay muchos tipos diferentes de bacterias y respiran usando diferentes métodos. Los dos métodos principales de respiración bacteriana son la respiración aeróbica y la respiración anaeróbica.
¿Cómo resisten las bacterias aeróbicamente?
Las bacterias que respiran aeróbicamente necesitan oxígeno para vivir. Utilizan oxígeno como combustible para ayudar a quemar energía y proporcionarles la energía necesaria para la vida. Este tipo de respiración bacteriana es del mismo tipo que los seres humanos usan, de ahí el término "ejercicio aeróbico". El principal subproducto de la respiración aeróbica de las bacterias es el dióxido de carbono.
¿Cómo resisten las bacterias de forma anaeróbica?
Muchos tipos de bacterias respiran de forma anaeróbica. En otras palabras, pueden pasar por el proceso de la respiración sin presencia de oxígeno. En lugar de usar oxígeno para ayudarlos a quemar la energía en sus alimentos, estos tipos de bacterias usan otros químicos naturales para crear reacciones químicas y liberar la energía que necesitan. Los químicos comunes que ocurren naturalmente incluyen nitratos, sulfatos y dióxido de carbono. La respiración anaeróbica en bacterias generalmente crea muchos subproductos. Muchos de estos subproductos pueden ser tóxicos o peligrosos para los seres humanos e incluyen etanol e hidrógeno.