Hay varias razones por las que "demasiado joven" puede ser un problema. En primer lugar, puede provocar una falta de experiencia y madurez, lo que puede dificultar el manejo de las responsabilidades y presiones de la fama. En segundo lugar, puede provocar una falta de privacidad y libertad personal, ya que las celebridades jóvenes pueden encontrarse constantemente en el centro de atención. En tercer lugar, puede provocar una falta de apoyo y orientación, ya que es posible que las celebridades jóvenes no tengan los recursos o la experiencia para afrontar los desafíos de la fama.
En algunos casos, "demasiado, demasiado joven" puede tener consecuencias negativas como adicción, problemas de salud mental o incluso la muerte. Algunos ejemplos notables incluyen a Michael Jackson, quien logró un gran éxito como estrella infantil y luego luchó contra la adicción y problemas de salud; o River Phoenix, que fue considerado uno de los actores jóvenes más prometedores de los años 80 pero murió por una sobredosis de drogas a los 23 años.
Es importante recordar que no todas las celebridades jóvenes o personas exitosas experimentan resultados negativos. Sin embargo, también es importante reconocer los desafíos y riesgos potenciales que conlleva lograr el éxito a una edad temprana.