He aquí por qué:
* Tipos de suelo: Diferentes tipos de suelo tienen diferentes estructuras inherentes. Los suelos de arcilla tienden a ser densos y compactos, mientras que los suelos arenosos son sueltos y porosos. Los suelos ardientes ofrecen un equilibrio de ambos.
* Necesidades de la planta: Las diferentes plantas tienen diferentes requisitos. Algunos prefieren suelos bien drenados, mientras que otros prosperan en suelos retentivos de humedad.
* Propósito: ¿Estás cultivando cultivos, construyendo una casa o paisajismo de un patio? Cada propósito tiene diferentes requisitos para la estructura del suelo.
Aquí hay un desglose de algunas estructuras del suelo comunes y sus beneficios:
* granular: Esta estructura es ideal para la mayoría de las plantas porque permite un buen drenaje, aireación y retención de agua. Se caracteriza por partículas desmenuzables y bien agregadas.
* migas: Similar a granular, esta estructura presenta agregados pequeños y redondeados que se trabajan fácilmente.
* platy: Capas horizontales aplanadas que obstaculizan el drenaje y el crecimiento de la raíz. Esta estructura no es ideal para la mayoría de las plantas.
* Blocky: Grandes agregados angulares que se pueden encontrar en suelos de arcilla. Estos agregados pueden ser difíciles de trabajar y también pueden obstaculizar el drenaje.
* prismático: Agregados en forma de columna con grietas verticales. Esta estructura se encuentra en suelos con alto contenido de arcilla.
Para determinar la mejor estructura del suelo para sus necesidades, considere:
* Lo que quieres crecer o construir: Investigue la estructura del suelo ideal para su planta o propósito específico.
* El tipo de suelo existente: Evaluar la textura y la estructura de su suelo.
* Enmiendas del suelo: Puede mejorar la estructura del suelo agregando materia orgánica, como compost o estiércol.
Al comprender las diferentes estructuras del suelo y sus características, puede elegir el mejor para sus necesidades y mejorar la salud de su suelo.